En el último Salón del Automóvil de Ginebra, las marcas Ferrari y McLaren se lucieron con la presentación de sus primeros “superdepotivos” híbridos. La firma italiana presentó a La Ferrari, mientras que el fabricante alemán presentó el P1, ambos capaces de alcanzar los 300 km/h en menos de 20 segundos.
El lanzamiento de estos vehículos no sólo confirma la recuperación del mercado del lujo automotor, sino también que la tecnología híbrida se instala definitivamente en un nicho que históricamente vibró con el rugir de los motores a combustión de gasolina.
Ferrari LaFerrari
La última creación de la casa italiana está llamada a ser el sucesor del Enzo Ferrari. Es un auto que asombra por su figura y potencia.
Mide aproximadamente 4,70 metros de longitud, 1,99 de ancho y 1,12 de altura y al igual que el Lamborghini Veneno, para su carrocería se utilizaron cuarto tipos de fibra de carbono para mejorar su aerodinámica.
Con un motor V12 de 6.300 cc, que eroga 800 caballos de fuerza, además de un propulsor eléctrico que genera 163 caballos más. Este vehículo puede ir de 0 a 100 km/h en menos de tres segundos, y alcanzar los 300 km/h en tan solo 15 segundos.
Comparado con el Enzo, La Ferrari tiene un consumo menor y sus emisiones de CO2 se han reducido un 50%.
Cabe destacar que sólo se fabricarán 499 unidades de este modelo, y aunque la casa italiana aún no ha dado el precio oficial, se espera sobrepase el millón de dólares.
McLaren P1
El McLaren P1, en tanto, es el sucesor del modelo F1 y fue diseñado para ser el mejor auto de pilotos del mundo.
En esa línea, sus creadores aseguran que es el vehículo de producción masiva con mayor carga aerodinámica en carretera. En esto incide, en parte, su sistema Ride Height (Control de Altura de Marcha), su alerón regulable y su carrocería, la que está hecha de “Fibras up to”, que son cinco veces más fuerte que el titanio de mejor calidad. A esto se suma el uso del Kvlar, mismo componente que se ocupa para fabricar chalecos antibalas.
En cuanto al corazón del auto, cuenta con un motor V8 doble turbo de 3,8 litros el que, sumado al motor eléctrico, alcanza los 916 CV con una velocidad máxima (limitada electrónicamente) de 350 km/h. De 0 a 300 km/h, en tanto, el auto acelera en menos de 17 Segundos: cinco segundos más rápido que el legendario McLaren F1.
Cabe destacar que, para mantener la exclusividad, la producción se limitará a solo 375 unidades y su precio superaría el US$ 1,3 millones.